Primer paso: hacer una lista
En función del viajero, puede bastar una sola o puede que necesitemos más de una. Hagamos una lista con lo que podemos necesitar en función de nuestro viaje, será la mejor forma de repasar que no olvidamos nada. Ropa (verano, invierno,...), higiene, entretenimientos,... Siente la satisfacción de tachar los elementos de la lista conforme están en su lugar, ¿qué es básico y qué puedes necesitar?
Paso dos: comienza con tiempo
Sobre todo si no eres viajero habitual, repasa elementos básicos y necesarios como pasaporte, código de reserva,... documentos y demás que no podemos olvidar por ser determinantes para poder realizar el viaje. Si te estresas fácilmente, deja las cosas lista con días de antelación, seguro que esto te relaja. Es importante que
tengas en cuenta que necesitarás tener más a mano y que no tanto.
Un consejo: por ejemplo para el pasaporte, guárdalo en un lugar escondido, seguro pero que tengas fácil acceso.
Tercer paso: haz un plan y síguelo
Esto puede ser útil una vez que hayas llegado, una parte importante de la preparación es qué hacer y cómo hacerlo cuando lleguemos por primera vez a destino. Si no sabes cómo llegar de un punto A a un punto B (por ejemplo del aeropuerto al hotel en transporte público). Podemos consultar en los mapas de google, el street view puede ser de mucha utilidad para ayudarnos a situarnos, incluso podemos imprimir un mapa si lo consideramos oportuno.
Cuarto paso: ¡nos vamos!
Una vez cubiertas todas las bases, es el momento de relajarse y descansar. De coger energías para el disfrutar el viaje al máximo, haz una última comprobación y listo, estás preparado para todo. No te preocupes si olvidas cosas como un cepillo de dientes o similar, lo podrás comprar en destino. Sal con tiempo hacia el aeropuerto, mejor prevenir que curar.
Si tenéis algún consejo que añadir, os agradeceríamos enormemente nos lo hicierais llegar.
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